Falsa



U  B  L  I  C  I 
D  A  D


U  B  L  I  C  I 
D  A  D
 
 
 
 
 
 

LA
FALSA APARIENCIA
 
 


 
 
 



Un día, por encargo de su abuelita,
Adela fue al bosque en busca de
setas para la comida. Encontró unas
muy bellas, grandes y de hermosos
colores llenó con ellas su cestillo.

 

-Mira abuelita -dijo al llegar a
casa-, he traído las más hermosas…
 

¡mira qué bonito es su color
escarlata!
 

Había otras más arrugadas, pero las
he dejado.
 

-Hija mía -repuso la anciana-
 


Esas arrugadas son las que yo
siempre he recogido. Te has dejado
guiar por las y apariencias
engañosas y has traído a casa hongos
que contienen veneno. Si los
comiéramos, enfermaríamos; quizás
algo peor…
 


Adela comprendió entonces que no
debía dejarse guiar por el bello
aspecto de las cosas, que a veces
ocultan un mal desconocido.
 
 
 

Volver al menu cuentos.