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Había una vez una niña que le gustaba ir al
parque que estaba cerca de su casa, siempre iba con su abuelita y hermanito. Un
día estaba allí jugando como loca.
Estaba muy contenta divirtiéndose con sus amiguitos, cuando de repente resbaló y
se cayó del columpio, por sorpresa alguien pasó y la atrapó, la niña estaba muy
asustada porque se iba a golpear muy duro. Gracias a esa persona no le pasó
nada. La niña estaba tan asustada que le pidió a su abuelita que se fueran para
la casa.
Luego de unos días, la niña volvió al parque, pero jugó con más cuidado y no le
pasó nada malo. Ella entendió que aunque sea un lugar de diversión se debe jugar
con precaución.
Esa niña era YO.
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